Cada cierto tiempo, nos gusta renovar nuestro hogar, y para ello existen miles y miles de trucos que nos van a permitir desde hacer una reforma completa, hasta introducir pequeños cambios económicos que van a suponer un antes y un después, de manera que en esta ocasión analizaremos la opción de utilizar pintura para azulejos.
Qué es la pintura para azulejos
La pintura para azulejos es un tipo de producto específico que ha sido diseñado y tratado con el fin de garantizar los mejores resultados a la hora de pintar sobre superficies sin adherencia como es el caso del azulejo.
Recordad que no vamos a poder utilizar cualquier tipo de pintura, ya que la pintura normal como la que utilizamos para pintar las paredes, precisa de una superficie que sea algo rugosa, por lo que en el azulejo podríamos conseguir que se quedase, pero pronto empezaría a descascarillarse quedando la cocina o el baño bastante mal en cuanto a estética se refiere.
Por esa razón, siempre debemos asegurarnos de que compramos una pintura específica y que permita un buen agarre al azulejo o a cualquier superficie sin poros.
Cuál es la pintura que tengo que elegir
Os decíamos que la pintura tiene que ser específica para evitar que en una semana ya comience a deteriorarse, y en este sentido, tenemos la suerte de contar con productos de mucha calidad, por lo que no nos va a resultar complicado dar con la pintura perfecta para azulejos.
En realidad no se trata de pintura propiamente dicha, sino que es un tipo de esmalte que garantiza una fantástica elasticidad, y se caracteriza por ofrecer una resistencia en conjunto, lo que significa que sus moléculas no se separan y de esta forma no se agrieta como ocurre con otras alternativas.
Además, en la actualidad podemos encontrar pintura para superficies lisas de prácticamente cualquier color, garantizando una fantástica resistencia a la humedad y con características específicas como la posibilidad de elegir con o sin brillo, satinado, y en definitiva un acabado que se adapte a nuestras necesidades.
Las ventajas que aporta pintar los azulejos
Si tenemos en mente cambiar los azulejos del baño o la cocina, está claro que nos vamos a meter en una obra muy considerable.
En primer lugar, tenemos que quitar los azulejos viejos y deshacernos de ellos, deberemos preparar y alisar la pared para la nueva colocación, y finalmente, deberemos adherir el nuevo azulejo.
Esto supone un coste económico importante, además de que vamos a producir mucho residuo del que deberemos deshacernos lo antes posible, y a su vez, también vamos a tragar polvo, mucho polvo.
De ahí que la opción de aprovechar el viejo azulejo y cambiar su apariencia sea una alternativa inteligente, aportando una belleza fantástica, ahorrando mucho dinero, reduciendo los dolores de cabeza y, a su vez, también evitando generar más residuos de lo necesario, por lo que no hay duda de que es una alternativa que nos beneficia a nosotros, a los vecinos y al medioambiente.